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Causa Wenance: la trama detrás de los teléfonos celulares que se le perdieron a la Policía y un fallo favorable a Alejandro Muszak

Mientras dura en el aire la bronca por la escandalosa pérdida de tres dispositivos electrónicos que debían ser peritados en el caso Wenance, el detenido empresario Alejandro Muszak recibió este viernes una buena noticia luego de que una jueza hizo lugar al pedido de sus abogados para sacarle la causa al juzgado que lo puso tras las rejas y la lleve a un fuero donde —según denuncian los damnificados— las resoluciones le vienen siendo todas favorables.

El último movimiento judicial llegó sobre el mediodía del viernes y traerá una decena de apelaciones y oposiciones, que pueden generar una traba de contiendas alrededor de un caso complejo que investiga si existió un delito de guante blanco en la fintech o en alguna de sus subsidiarias.

En concreto, la jueza Paula González, responsable del Juzgado Nacional en lo Criminal Nro. 43, aceptó un pedido planteado por la defensa de Muszak para que el Juzgado de Garantías Nro. 3 de de San Isidro se inhiba de seguir investigando el caso y le derive lo que tiene al momento a su oficina.

Según explican fuentes judiciales, este fallo es beneficioso para Muszak ya que el Juzgado 43 viene siendo «demasiado» benevolente con el empresario, mientras que San Isidro lo había procesado y puesto en prisión preventiva en apenas un par de meses de trabajo.

La decisión de González va en contra incluso de la recomendación de la fiscal Mónica Cuñarro, que investigó el caso y recomendó que directamente toda la causa se remita a San Isidro ya que estaban más avanzados. Según explicó en un durísimo escrito, el tribunal a cargo de González no lleva adelante medidas «relevantes en miras de dar una respuesta» y son «meramente dilatorias con el fin de aparentar actividad». Una sensación que comparten los damnificados respecto a González.

Alejandro Muszak, el CEO detenido. Alejandro Muszak, el CEO detenido. Es que desde que salió sorteada en septiembre del año pasado, todas las medidas fueron a favor de Muszak: no lo convocó para tomarle declaración indagatoria, lo eximió de la prisión y no avanzó con el peritaje de una tanda de celulares y dispositivos electrónicos allanados en agosto de 2023. Es decir, en 10 meses nunca se peritaron, una demora fuera de cualquier tipo de regularidad. «Es obsceno», protesta una fuente judicial.

Precisamente tres de esos dispositivos son los que perdió la Policía, tal como comunicaron desde la fuerza la semana pasada, una noticia que causó bronca entre los defensores. Se trata de dos celulares iPhone (uno modelo 12, color negro y otro XR) y una notebook, también marca Apple, color rosada.

Este viernes, González desestimó la recomendación de Cuñarro y pidió que le remitan la causa de San Isidro para acoplarla a otras denuncias que tiene en su escritorio. Un fallo al que se van a oponer desde San Isidro y desde las distintas querellas, según pudo confirmar Clarín.

El material hallado en el allanamiento a Santiago Abacens, otra figura clave dentro del esquema.El material hallado en el allanamiento a Santiago Abacens, otra figura clave dentro del esquema.Si se trabase una disputa por la competencia, quien debería intervenir es la Corte Suprema de Justicia de la Nación, una medida que puede demorar aún más la causa.

Muszak y otras cinco personas (Anahí Claudia Cristina Mazalán, Juan Arnaldo Silvero, Paola Adriana Vallone, Pedro Luis Viggiano y Rodolfo Cleto García) se encuentran detenidas por la causa impulsada por el Fiscal de UFI Vicente Lopez Alejandro Guevara, que se encuentra en el Juzgado de San Isidro.

El misterio de los dos celulares

No fue el único fallo de González de esta semana. Es que la jueza también se negó a avanzar con una reconstrucción precisa sobre cómo fue la cadena de custodia de los dispositivos móviles encontrados en los distintos allanamientos del caso para entender en qué momento se perdieron los dos teléfonos y la notebook.

Tampoco resolvió avanzar con las pericias sobre los otros dispositivos móviles que están secuestrados y sobre 20 cajas de documentación que se encuentran en el mismo almacén de la calle Zepita donde a la Policía se le extraviaron los celulares.

El temor de los querellantes es que se pierdan o se traspapelen más elementos en el tiempo que sigan sin hacerse las pericias correspondientes, por las cuales la fiscalía viene insistiendo hace diez meses.

Los dispositivos fueron secuestrados el 2 de agosto del año pasado, en un operativo que tuvo siete allanamientos simultáneos en las oficinas de la firma Promotora Fiduciaria, de su director Santiago Abacens y en el domicilio de Muszak.

Alejandro Muszak, el CEO de Wenance. Foto: Andrés D'EliaAlejandro Muszak, el CEO de Wenance. Foto: Andrés D’EliaEn esa jornada se llevaron en total cinco tablets, dos discos duros, tres netbooks, dos notebooks, cuatro celulares, tres pendrives y tres computadoras, más una enorme cantidad de material documental en papeles, créditos, pagarés y contratos. Todo eso sigue a la espera de ser peritado.

Pero la particularidad gira alrededor de los tres dispositivos a los que se les perdió el rastro. Es que la notebook rosa marca Apple estaba «medio oculta» dentro del departamento de Muszak, según cuentan fuentes judiciales. Apareció luego del hallazgo de otras dos computadoras, dentro de un cajón en otro cuarto. Como a los pesquisas les llamó la atención el lugar donde se encontraba, consultaron al juzgado si correspondía llevársela.

Los dos teléfonos iPhone que hoy estaban desaparecidos los investigadores los hallaron en el auto de Muszak, un Mercedes Benz que estaba en el garaje. Ese día, el CEO de Wenance había llegado a su casa en Av. del Libertador en el coche. La Justicia cree que podrían haberle informado previamente de los allanamientos que estaban llevándose a cabo, y por eso dejó los teléfonos en el coche.

No solo los dejó allí. Los guardó abajo de la alfombra del asiento del acompañante, según consta en las actas del día del allanamiento. Cuando los pesquisas consultaron con el portero el horario de llegada del empresario, decidieron ir a revisar también el vehículo. Encontraron eso y varios papeles más. También 80 mil pesos y 3 mil dólares en el baúl del Mercedes Benz.

Todos estos allanamientos habían sido ordenados por el Juzgado N° 3 de Tierra del Fuego, por una denuncia de inversores de aquella provincia. Sin embargo, se excusaron de seguir participando en el caso por una cuestión de jurisdicción. Allí fue cuando se sorteó el expediente y recayó en González.

El material, mientras tanto, quedó guardado en la planta que tiene la división Antifraudes de la Policía Federal en la calle Zepita. El 29 de enero de este año, el Subcomisario Marcelo Rodríguez Vimo, Segundo Jefe de la División Antifraude de la PFA, pidió retirar los dispositivos electrónicos para llevarlos a la sede central de la Federal, en Av. Belgrano.

Los elementos que se le secuestraron a Muszak al momento de ser detenido en la causa San Isidro.Los elementos que se le secuestraron a Muszak al momento de ser detenido en la causa San Isidro.Rodríguez Vimo fue el oficial que se presentó la semana pasada ante el Tribunal para avisar que se habían perdido los dispositivos. Según relató en su denuncia, los habían comenzado a buscar el 19 de abril. Es una fecha curiosa, apenas cuatro días después de que a Muszak lo detuviesen en la causa de San Isidro.

A partir de la pérdida la jueza González inició una causa por posible delito de acción pública alrededor del extravío del material, una causa que se sorteó y cayó en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nro 50 y la Fiscalía Nro 1.

La pérdida de los celulares no solo cayó pésimo entre los ahorristas, sino también en el Gobierno. Es que según el portal iProfesional, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, habría ordenado que se investigue qué falló en la cadena de custodia alrededor de los teléfonos que se perdieron.

Mientras tanto, el resto de los elementos continúan a la espera de ser peritados. Y los damnificados quieren saber qué pasó con su dinero.

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