Aunque la clasificación se ve lejana, el duelo del martes por Sudamericana tiene valor deportivo, económico y simbólico para el ciclo del DT. Se vienen cambios por obligación y rendimiento.
La Copa Sudamericana le da una nueva chance a Unión este martes a las 21.30, cuando reciba en el estadio 15 de Abril a Mushuc Runa, por la cuarta jornada del Grupo E.
No será un partido más: representa una doble urgencia. Una victoria que calme las aguas y respuestas concretas para un Leonardo Madelón que empieza a mirar más allá del corto plazo.
El técnico, que llegó para devolverle competitividad al equipo y avanzar en el plano internacional, sabe que el revés ante Palestino lo dejó al borde de la eliminación, aunque las chances, matemáticamente, aún existen.
Pero más allá del sueño de octavos, el partido tiene valor propio: está en juego la imagen del equipo, la continuidad de varios jugadores y un premio económico de 115 mil dólares que no es menor en la economía rojiblanca.
Para este cruce, Madelón deberá rearmar el equipo por las lesiones de Bruno Pittón y Mauricio Martínez. En la defensa, las alternativas son Del Blanco o Corvalán; en el mediocampo, Profini o Ham pelean por un lugar.
Además, podría haber novedades en ataque, donde Marcelo Estigarribia atraviesa un bajísimo momento futbolístico y su lugar ya no estaría garantizado.
“Estos dos partidos me servirán para sacar conclusiones”, dijo el DT tras la caída ante los chilenos. Pero también necesita mostrar señales positivas para que su ciclo no pierda respaldo antes de terminar el semestre.
El martes será tiempo de respuestas. Aunque el margen es estrecho, el valor del partido trasciende la tabla de posiciones. Es un desafío para los jugadores, una prueba para el cuerpo técnico y una posibilidad de empezar a cambiar la historia reciente del equipo.
Fuente: SFA/R1