Es el partido que sirve para cargar a un amigo, a una pareja, a un familiar siempre y cuando te toque la suerte de ganar. Es la desazón total para el que pierde y blanco de burla constante, al menos hasta el próximo duelo. El escenario es el Coloso Marcelo Bielsa. La hora señalada es a las 17 de un domingo que pinta nublado y con algunas lluvias. Con Fernando Echenique como árbitro y televisación de TNT Sports.
Por Franco Scala
La ciudad se paraliza una vez más. Hay Clásico en Rosario. Newell’s y Central se vuelven a enfrentar. El escenario es el Coloso Marcelo Bielsa. La hora señalada es a las 17 de un domingo que pinta nublado y con algunas lluvias. Con Fernando Echenique como árbitro. El juez elegido es de la camada “saca partidos” y un explicador serial de cada decisión.
No es nada fácil jugar un Clásico rosarino. Lo dice todo el mundo que alguna vez vivió este partido bien desde adentro. Es que se empieza a jugar a partir de que sale el fixture. Para muchos es un campeonato aparte dentro de un torneo o una copa. Porque así lo viven y lo hacen sentir los hinchas genuinos.
Es el partido que sirve para cargar a un amigo, a una pareja, a un familiar siempre y cuando te toque la suerte de ganar. Es la desazón total para el que pierde y motivo de burla constante, al menos hasta el próximo duelo. Porque la pasión en Rosario no se negocia y eso irradia como el sol en enero cada vez que se enfrentan Newell’s y Central.
Se comenta, se dice que los antecedentes no importan en los Clásicos. Pero es necesario saber cómo viene uno y cómo llega el otro. Y en ese aspecto la diferencia es grande. Newell’s está herido, golpeado y desorientado. La actualidad dirigencial, deportiva y futbolística no es la ideal. Pero quizás el Clásico le sirva a la Lepra para empezar a subir algún peldaño y arrancar de nuevo. Central es todo lo contrario. El Canalla arriba al Parque Independencia agrandado, altanero y equilibrado. De todas formas no puede descuidar su norte y darse el lujo de perder esta clase de partidos, más con el historial favorable de los últimos años.
📋 Lista de concentrados para el Clásico #VamosCanalla 💪🇺🇦 pic.twitter.com/s5icVaz2mF
— Rosario Central (@RosarioCentral) February 15, 2025
La presión es de ambos. Newell’s porque es local y su gente pide a gritos un triunfo. Central porque parte como candidato y cuenta con cierta espalda.
Newell’s y Central. Central y Newell’s. Un Clásico que parte en dos a Rosario. Un Clásico para disfrutar y sufrir al mismo tiempo. Un Clásico pasional hasta los huesos. Comienza la cuenta regresiva hasta la 17 del domingo. Que gane el mejor.